Bienvenidos al blog Conectando semillas,

Este blog es una iniciativa del Equipo Esperi, formado por un grupo de profesionales (psiquiatras, psicólogos, educadores y trabajadores sociales) dedicados al cuidado de todos aquellos niños y jóvenes que presentan algún tipo de problema relacionado con la salud mental.

Nace con la ilusión de crear un espacio virtual en el que tanto los jóvenes y sus familias como los profesionales podamos compartir nuestros puntos de vista.

Por nuestra parte queremos poner a vuestra disposición material seleccionado que consideremos útil a la hora de prevenir, evaluar, abordar y/o afrontar los diferentes problemas de salud mental en la infancia y juventud.

Pero vosotros sois los auténticos protagonistas. Por eso os animamos a que compartáis aquí vuestras inquietudes, opiniones, experiencias, consejos, esperanzas, vuestros logros, vuestras metas,… para que desde aquí llegue a todos los jóvenes y familias que están pasando por circunstancias parecidas y que necesitan saber que no están solos y para que la sociedad en su conjunto se haga eco.

Mostrando entradas con la etiqueta padres responsables. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta padres responsables. Mostrar todas las entradas

jueves, 28 de febrero de 2013

INFLUENCIA DE LA CRISIS ECONÓMICA EN LA SALUD MENTAL DE LOS MENORES ESPAÑOLES


El desempleo de los padres es una de las situaciones más asociadas a la pobreza y con una marca  directa en la familia. Los niños no son ajenos. Sufren la crisis en los hogares cuando sus padres se quedan sin trabajo y sin ingresos, cuando ellos y sus familias son desahuciados, cuando debido a la reducción de los ingresos familiares se empobrece la calidad de su alimentación, dejan de hacer actividades que llevaban años realizando (extraescolares), se reduce el gasto educativo, en deporte, ocio,… y especialmente tenemos que destacar la tensión que aparece en la familia ante la nueva situación, afectando a las relaciones de todos sus miembros.
Esta semana los profesionales del Equipo Esperi de la Fundación Internacional O’Belén, queremos hacernos eco sobre el segundo informe de “La infancia en España 2012-2013” de UNICEF, donde se analiza la relación que está teniendo la actual crisis económica  en la salud de la infancia. Queremos aportar algunos consejos para esas familias que están pasando por una situación difícil.

¿Cómo viven los niños las consecuencias de la crisis?
Los niños están siendo conscientes de lo que pasa en las familias, y aunque la forma en que se filtra es distinta en cada hogar, sí se aprecian elementos comunes:
- Los niños perciben y en ocasiones sufren el incremento del estrés de los padres. Los niños lo escuchan todo, los diálogos de lo que pasa en casa, el padre o la madre cuando pierde el trabajo, que no se llega económicamente a fin de mes. Aunque son cosas que se intentan esconder, un niño de 7 u 8 años capta perfectamente lo que sucede.
- Muchos niños se sienten culpables de la situación creada, que les genera miedo e inseguridad. Explíquele que esta situación no es su culpa de ningún miembro de la familia.
A veces en casa, los roles de los adultos cambian respecto a los hijos, por ejemplo cuando uno de los padres pierde el empleo y asume las responsabilidades domésticas y el cuidado de hijos.
- Se incrementa el nivel de tensión en las relaciones intrafamiliares, afectando a los más pequeños.
 Los periodos de crisis están asociados  al incremento de enfermedades mentales, y también al consumo de drogas y alcohol de los progenitores.
- Se modifican las expectativas de los propios hijos y de los padres sobre su futuro.

Actualmente en España, uno de cada cuatro menores vive bajo el umbral de la pobreza, según el informe “El impacto de la crisis en los niños de Unicef”. Los niños y niñas ya son en España el grupo de edad más pobre de la población. La actual situación económica tiene consecuencias directas en la calidad de vida de los niños y también sobre su salud física y psicológica actual y futura.
Así desde el Servicio de Psiquiatría del Niño y Adolescente del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, se alerta que la actual crisis  puede dejar “secuelas” en la salud mental de los niños y afectará  a su comportamiento de adulto.
 El problema en muchos casos es que no se les hace partícipe de la situación, sino que son sujetos pasivos de las malas noticias. Esto hace que se puedan sentir excluidos e incluso culpables de lo que está sucediendo, de que sus padres estén tristes o angustiados por no llegar a fin de mes. Es recomendable que siempre que se pueda y en la medida de la capacidad del niño, se cuente con ellos y se le comuniquen las cosas, porque el hecho de formar parte de la unidad familiar es para ellos muy importante. No hacerlo podría ocasionar dificultad para relacionarse, baja autoestima, una menor empatía o desconfianza.
Evite sobrecargar a los niños mayores con demasiados detalles o preocupaciones que podrían asustarlos. Dele explicaciones breves  y sea claro  con respecto a los cambios que sufrió el presupuesto familiar.
Aprenda a decir que no. A veces los padres dicen que sí a los hijos antes de pensar cómo harán para afrontar un nuevo gasto.
Hable acerca de los cambios que van a ocurrir en el hogar de manera sencilla.
Mantenga la comunicación, el amor y el humor, aunque sean momentos duros.


Referencias: Informe “Impacto de la crisis en los niños” de UNICEF. lainformacion.com. Cómo hablar con tus hijos acerca de la pérdida de empleo (Dra. Helan Duch)

miércoles, 13 de febrero de 2013

LA AUTOESTIMA ES CLAVE EN EL DESARROLLO DE NIÑOS Y ADOLESCENTES


La AUTOESTIMA es la idea que tenemos sobre nuestra propia valía como persona. Sentirse cómodo con uno mismo, aceptarse tal y como uno es y quererse sin condiciones es esencial para la supervivencia psicológica y para la salud mental del individuo.
La autoestima se va desarrollando a lo largo de la vida a través de experiencias por las que pasamos y por lo tanto es posible favorecer las condiciones para que pueda formarse de manera adecuada en nuestros niños y jóvenes.  La baja autoestima está relacionada con una forma inadecuada de pensar sobre nosotros mismos.
La autoestima que tengamos influirá en la forma de comportarnos. Por ejemplo, si nos vemos a nosotros mismos como poco sociables no nos esforzaremos en intentar relacionarnos con los demás, de modo que reforzaremos esa creencia negativa al no darnos la oportunidad de hacer nuevos amigos.
Dado que pensamientos, sentimientos y comportamientos se encuentran interrelacionados, la autoestima de una persona influye en cómo se siente, cómo piensa, aprende y crea, cómo se valora, cómo se relaciona con los demás y cómo se comporta.
La autoestima de los adolescentes. La adolescencia es uno de los periodos más críticos para el desarrollo de la autoestima, es la etapa en la que la persona necesita hacerse con una firme identidad. Durante la adolescencia se manifiestan ciertos cambios a nivel socio- afectivo, físico y cognoscitivo, se desarrolla la capacidad de reflexionar y pensar sobre uno mismo y de aceptar una nueva imagen corporal. El adolescente se hace una serie de preguntas sobre sí  mismo, por ejemplo “¿soy atractivo?”, “¿soy aceptado por mis compañeros?” Cuanto mayor sea la aceptación que se siente, tanto en la familia como en los compañeros /as, mayores serán las posibilidades de éxito.
¿Cómo afecta la autoestima a los niños y adolescentes? El nivel de autoestima influye en el desarrollo y desempeño de actitudes:
Condiciona el aprendizaje. Un joven con poca autoestima, está poco interesado y motivado en aprender, encuentra poca satisfacción en el esfuerzo, porque no confía en sus posibilidades de éxito.
Ayuda en la superación de dificultades: el adolescente con autoestima positiva es capaz de enfrentarse a problemas y fracasos.
Fundamenta la responsabilidad, la autonomía  y las relaciones sociales
 Favorece la creatividad: se arriesga con respuestas creativas y originales.
Afianza la personalidad:  se siente seguro de sus posibilidades como ser independiente (seguro, confiado y autoaceptado) y  como ser social (confía, valora y acepta a los demás).

Durante la adolescencia, tanto el grupo familiar, el de la escuela, los amigos, los medios de comunicación, contribuyen a moldear la autoestima.  Es una etapa en donde la autoestima tiende a  debilitarse. Por eso, una buena dosis de autoestima será  uno de los recursos más valiosos. Un adolescente con autoestima positiva:
-          Actúa independientemente.
-          Asume responsabilidades: actúa con seguridad de sí mismo.
-          Afronta nuevos retos con entusiasmo y se siente orgulloso de sus logros
-          Demuestras amplitud de emociones y sentimientos
-          Es tolerante frente a la frustración
-          Se siente capaz de influir en otras personas.

¿Cómo pueden ayudar los padres a desarrollar una autoestima positiva en sus hijos?
 1.- Los niños necesitan un hogar feliz y seguro, donde disfruten de cierta libertad y donde existan normas y límites que rigen la convivencia.
2.-Los niños necesitan sentir que son capaces de hacer cosas autónomamente y resolver sus pequeños problemas.
3.- La familia debe manifestar satisfacción por los logros y avances del niño.
4.- La familia debe dispensar elogios merecidos ante las tareas de los niños.
5.- La familia debe ayudar y enseñar al niño con orientaciones concretas ante sus dificultades, sin menospreciar los intentos frustrados del mismo.
6.- Es necesario evitar las comparaciones.
7.- La familia debe admitir los propios errores, porque para su seguridad, los niños necesitan aprender que a veces se fracasa y se cometen errores.
8.- Es necesario proponer a los niños tareas de dificultad ajustada que puedan realizar con éxito.
9.-En familia se deben fomentar el sentimiento de “estar satisfecho con uno mismo”, generando en el niño los pensamientos: “PUEDO HACER COSAS”. “SOY IMPORTANTE”. “PUEDO APRENDER”. “PUEDO EQUIVOCARME”. 

jueves, 24 de enero de 2013

¿SOY UN PADRE- MADRE RESPONSABLE? RESPONDE EL CUESTIONARIO PARA SABERLO


Hoy analizamos en nuestro blog el nivel de responsabilidad que estamos dando a nuestros hijos.  Por nuestro centro, pasan padres y madres que con frecuencia nos dicen de sus hijos   frases como: “en casa no hace nada”, “tengo que estar todo el día encima de él para que haga los deberes”,  “en casa no mueve ni un plato”,… Todas estas situaciones pueden deberse a que estos hijos no han tenido la oportunidad de aprender correctamente actitudes de responsabilidad apropiadas a su edad o que por sus características, se hayan resistido a asumirlas.
Educar en la responsabilidad no es fácil.  Sólo mediante el esfuerzo diario de padres y educadores se consigue. Un niño se siente satisfecho cuando actúa responsablemente  y recibe la aprobación social, que favorecerá su autoestima.
La responsabilidad se adquiere y desarrolla progresivamente, por etapas y depende de cada persona y del contexto o ambiente. Por eso existen ritmos diferentes para cada niño.
A continuación os presentamos un cuestionario para ayudarte a analizar cómo actúas y ensañas a tus hijos/as a ser responsables. No dejes de contestar a ninguna pregunta.

1.-  Controlas a tus hijos cuando les manas hacer algún encargo. .......................  SÍ/NO
2.- Tus hijos tienen que cumplir hasta el final la tarea o compromisos que han adquirido  ..................................................................................................... SÍ/NO
3.- Se te escapan cosas como “prefiero hacerlo yo, que lo hago antes y mejor”...... SÍ/NO
4.-Dejas que tus hijos/as vivan las consecuencias de sus decisiones ....................  SÍ/NO
5.- Manifestáis desacuerdo respecto a las responsabilidades asignadas a vuestros hijos/as (horarios, tareas, cuidado personal, etc.) ................................................... SÍ/NO
6.- Cuando propones a tu hijo/a una tarea, le sueles explicar claramente cómo debe hacerla y lo que esperas de él................................................................. SÍ/NO
7.- En vuestra casa están claramente repartidas las responsabilidades de cada miembro  ..................................................................................................... SÍ/NO
8.-Hago participar a mis hijos/as en la elección de juegos, ropas, actividades de ocio, etc................................................................................................. SÍ/NO
9.-Repites insistentemente las órdenes cuando  un hijo/a no responde o no hace lo que le has mandado ..................................................................................... SÍ/NO
10.-Permites que tu hijo haga por sí solo tareas aunque el resultado no sea el que tú hubieras deseado ............................................................................... SÍ/NO
11.- Valoras con reconocimiento, alabanzas, muestras de afecto, los hábitos de responsabilidad que muestra tu hijo/a de forma autónoma. .............................. SÍ/NO
12.- Os ponéis de acuerdo antes de mandar o pedir algo a vuestro hijo/a.............. SÍ/NO
13.- Cuando un niño/a no cumple lo que mandas o lo hace mal, sueles decirle cosas como “no se te puede dejar hacer nada” o “eres un inútil”. .................................... SÍ/NO
14.- En el momento de encomendar una tarea, expresas a tus hijos/as que confías en sus posibilidades diciéndoles: “sé que lo vas a hace bien” o frases similares. ............. SÍ/NO
15.- Educas a tus hijos/as para que sean independientes y tengan sus propios criterios ..................................................................................................... SÍ/NO
16.- A medida que tus hijos/as crecen les vas añadiendo nuevas responsabilidades adecuadas a su edad. ........................................................................... SÍ/NO
17.- Procuras que tu hijo/a cuente con el espacio y tiempo suficiente para que organice sus objetos personales. ......................................................................... SÍ/NO
18.-Les sueles hacer muchas cosas a tus hijos/as para evitarles malos ratos. ........... SÍ/NO
19.- Generalmente le dejas que abandone la tarea o juego elegido por él al poco de iniciarlo. ......................................................................................... SÍ/NO
20.- Exiges que tu hijo/a cumpla hasta el final el compromiso adquirido. ............. SÍ/NO

 Respuestas valoradas con 1 punto: 1 (Sí), 2(Sí), 3(No), 4(Sí), 5(No), 6(Sí), 7(Sí), 8(Sí), 9(No), 10 (Sí), 11(Sí), 12(Sí), 13(No), 14(Sí), 15(Sí), 16(Sí), 17(Sí), 18(No), 19(No), 20(Sí).(suma un punto por cada respuesta coincidente)
Puntuación entre 0 y 12: Debes prestar mayor cuidado en la educación de tu hijo/a.  Conviene que busques consejo.
Puntuación entre 12 y 16: Intenta mejorar modificando algunas conductas respecto a la educación de tus hijos.
Puntuación superior a 16: Haces lo que debes. No bajes la guardia.

Fuente: Desarrollo de conductas responsables 3-12 años. Gobierno de Navarra.